Los protagonistas que "arruinaron" sus series por cometer delitos
Después de las denuncias de acoso y abuso que señalaron a Kevin Spacey, protagonista de la exitosa serie House of cards, Netflix decidió poner fin a la misma. Pero no es la primera vez que ocurre que un programa televisivo queda atado al destino de sus figuras.
La industria del cine y la pantalla chica está llena de casos en los que la realidad intervino de manera directa sobre la ficción a partir de los delitos cometidos por distintas figuras.
Algunos casos:
La hora de Bill Cosby
Las reiteradas denuncias indican que Bill Cosby invitaba a mujeres a su casa, las drogaba, las dormía y luego las violaba. Estas acusaciones se remontan a diciembre de 1965, cuando el cómico tan sólo tenía 28 años. También hay acusaciones de violación sin drogas de por medio.
Son más de sesenta mujeres las que reconocen haber sido víctimas de Cosby mientras él brillaba en Hollywood. Hoy ver los 200 episodios de La hora de Bill Cosby no resultan tan graciosos cuando se sabe que las bromas las hace un violador.
Siete en el paraíso
Esta serie fue considerada por el Parents Televisión Council, órgano cristiano conservador de Estados Unidos, como la mejor de la televisión de su época.
Sin embargo, la historia de un reverendo y su esposa que criaban a siete hijos con nombres bíblicos tenía un dato nefasto; el sacerdote interpretado por el actor Stephen Collins confesó que había tenido sexo con una menor de edad.
Además en 1973, cuando Collins tenía 35 años, se desnudó tres veces delante de una menor de 13 años después de decirle que quería ponerse cómodo. También hay otras denuncias que involucran abusos a menores que llevaron a que el actor no vuelva a trabajar en Hollywood.
House of cards
Después de que Kevin Spacey fue denunciado por el actor Anthony Rapp de un intento de abuso cuando este último era menor, Netflix decidió romper todos los lazos con Spacey a pesar del éxito de House of Cards y tampoco postproducir la película Gore sobre el escritor Gore Vidal.
Otra de las denuncias fue realizada por Harry Dreyfuss, el hijo de Richard Dreyfuss,que relató como Spacey le manoseó delante de su padre sin que el actor de Tiburón se percatara. Además ocho trabajadores de House of cards planteron cómo eran acosados por el actor que tenía una "actitud tóxica y depredadora". Series como Difficult People y Padre de familia ya habían denunciado estos comportamientos en sus series, demostrando que Hollywood era consciente de los delitos cometidos por Spacey que ahora está refugiado en una clínica de "rehabilitación" para adictos sexuales.
Glee
El actor Mark Salling, que era mucho mayor que su personaje (tenía 27 años) de 15 años sorprendió por cómo fue creciendo en protagonismo en la serie Glee.
En diciembre de 2015, Salling fue detenido en su casa de Los Angeles por posesión de fotografías y vídeos de pornografía infantil. En mayo presentaron oficialmente cargos. En septiembre de 2017 comenzó el juicio y finalmente el mes pasado se declaró culpable.
Ahora, no puede acercarse a las escuelas, ni piscinas públicas, ni parques, y tampoco puede tener contacto con menores de edad ni en persona ni vía mail. También podría pasar entre cuatro y siete años en la cárcel.
Power Rangers
¿Quién no recuerda a estos justicieros de colores que impactaban en la pantalla de los 90? Lo cierto es que la inocencia de esos personajes pasa a estar diluida cuando en 2002 con la nueva versión Power Rangers Wild Force, Ricardo Medina que interpretaba al Power Ranger rojo terminó siendo arrestado, en 2015, por el asesinato de su compañero de piso, Joshua Sutter.
Entourage
La modelo Ariane Bellamar contó en Twitter utilizando el hashtag #Metoo cómo en dos ocasiones fue "arrinconada" y manoseada por el actor Jeremy Piven que interpreta al agente de actores Ari Gold en la serie de HBO.
Bellamar hizo su denuncia pública el pasado octubre e incluso citó a la autoridades a cargo de la serie y puso de relieve una vez más que Hollywood muchas veces sabe que hay conductas abusivas y la industria oculta las mismas, como ocurrió con el caso de Harvey Weinstein.
Vía: La Vanguardia/Agencias