La Asociación Argentina de Actores repudió los dichos de Suar
Luego de que el empresario y actor criticara sin tapujos a sus colegas, la AAA salió a responderle y dejar en claro su opinión con un comunicado.
El gerente de programación del canal televisivo del Grupo Clarín había dicho que muchos actores eran kirchneristas por plata. Mirá esas declaraciones y leé la respuesta de los artistas.
Comunicado de la Asociacion Argentina de Actores en referencia a los dichos de Adrián Suar:
"Es común encontrar en el sector empresarial esa aversión hacia la participación política de sus empleados, hacia lo ideológico, aún hacia la toma de conciencia de los trabajadores cuando deciden agruparse y sindicalizarse. El sueño de un mundo sin sindicatos que velen por los derechos de los trabajadores se hace explícito en la permanente intención de mantener el trabajo precarizado. Y no conformes con esto, como en este caso, pretenden la asepsia de pensamiento de los actores, ávidos de seguir manteniéndonos dentro de la “ficción”; esa que intencionalmente intenta trocar nuestro trabajo y nuestro arte por farándula, fuera de la realidad.
Suar pretende que defendamos exclusivamente intereses particulares. Que no nos importe el compañero. Que no nos importe nadie más que nosotros mismos. Pretende que no tengamos pensamiento político, participación ciudadana y lo más grave, opinión. La situación de debilidad de cualquier trabajador actor, famoso o no, frente a nuestros patrones hace que las palabras de Suar suenen a amedrentamiento. Pues son ellos en cada oportunidad y por un tiempo limitado los que determinan quienes trabajan y quienes no.
Como sabemos, hay varias maneras de limitar la libertad de expresión. Por supuesto que los actores conocemos la censura, las listas negras de épocas nefastas por la que atravesó nuestro país. Triple A y Dictadura, ejercieron sobre nosotros la represión en toda sus formas. Desgraciadamente, 28 compañeros detenidos desaparecidos así lo certifican. Tal vez estas expresiones bravuconas, quizá guionadas para provocar, no tienen la dimensión de lo sucedido en aquellos tiempos, pero igualmente, en plena democracia, tenemos la obligación de alertar sobre este escenario en donde desde el poder real se quiere imponer el mismo silencio, el mismo orden, el mismo temor, que nada se mueva, que los actores seamos meros decidores de textos ajenos, aún en la vida real.
Nos ha costado, todavía nos cuesta, y seguimos luchando para que los empresarios del sector, Suar entre ellos, reconozcan plenamente nuestra condición de trabajadores y respeten íntegramente nuestros derechos laborales. Lo único que falta es que sea un exponente de ese sector el que pretenda darnos el certificado de buenos ciudadanos y nos diga qué debemos decir y qué no".