Andrea Ghidone: "La mujer tanguera nació con las prostitutas"
“Madame Tango es una tanguera que nació en 1880 y que pasó por el espíritu de varias”, dice Andrea Ghidone luego de recitar, bailar y cantar sobre el escenario pero que debajo es quién también escribió, dirigió y produce aún hoy el gran show convocante de la Calle Corrientes en el Teatro Astral.
“Madame Tango es una tanguera que nació en 1880 y que pasó por el espíritu de varias”, dice Andrea Ghidone luego de recitar, bailar y cantar sobre el escenario pero que debajo es quién también escribió, dirigió y produce aún hoy el gran show convocante de la Calle Corrientes en el Teatro Astral.
Con un espectáculo de una hora, Ghidone reivindica a las prostitutas. “Te guste o no, ahí arrancó. Fueron las primeras y qué mejor que honrarlas. Porque en ese momento había que ser guapa de verdad, pero 100 años atrás esas mujeres donde ese poder de querer bailar, disfrutar, las llevaba a ser juzgadas por una sociedad. Esa fue la inspiración de esta Madame tango que se inspira en estas mujeres que hicieron cambiar la dinámica de la sociedad, fueron las primeras que bailaron y a mostrarse de otra manera, fueron unas avanzadas de la hostia”, relata la bailarina y actriz.
‘Madame Tango’ hace un recorrido dinámico por toda la historia de este género tan argentino que recorre varias orillas del mundo entero. A donde vayas se conoce a Argentina por el tango o por Maradona, y como bien dice Ghidone, estas mujeres de los viejos burdeles de los 100 barrios porteños fueron pioneras, fueron las juzgadas y eran las protagonistas de esas canciones donde su rol era el de ser la mala.
"Esta mujer ya estaba acostumbrada a que era la mala, ese personaje era el de ella y era discriminada y si el tipo que la conocía a las tangueras, eran mujeres libres, donde pudieron romper el legado de sus padres, que seguramente no las dejaban bailar, imagínate con el tipo de turno con el que estaban. Por eso eran unas avanzadas, porque en ese momento dejar a un tipo era complicado y buscaron su libertad. Hicieron cosas que para la sociedad estaban mal y hoy las vemos y decimos, son unas gran avanzadas, me pongo en la piel de ellas y no podría”.
Además, remarca la posición de aquellas mujeres en aquél tiempo donde sabían que el mundo iba a estar en su contra y hace un revisionismo histórico donde analiza que en realidad esas mujeres tildadas como las que dejaban al tanguero era porque no se bancaban su violencia. “Fueron unas pioneras en todo esto de que el hombre, que si el tipo la cagaba a trompadas ellas se iban, eran porque los tipos las maltrataban, más el macho arravalero, tomarla como ejemplo y cambiar la visión que si lo tenemos que contar hoy es ‘me cansé de tu maltrato, tu violencia y por eso me voy’.
“Voy a aprender a llorar sin sufrir,
sin detenerme a mirar una flor,
a encallecer lentamente
¡igual que la gente sin alma y sin voz!
Voy a entender que se puede morir,
y latir... al compás del reloj;
como una máquina fiel
igual que un robot...
¡sin piel!”
Dice una de las estrofas de ‘Sin piel’, letra de Eladia Blázquez y que Andrea remarca como muy importante en esta cuestión :”se puso una piel de robot porque no le importaba nada. Es genial, sobre el problema del otro si yo lo dejo. Si yo hoy estoy en una relación y se termina, el otro tiene algo que superar.y yo igual, porque ¿qué voy a hacer? ¿me voy a poner a llorar en un rincón porque me abandonaste? No va a cambiar, seguí llorando pero la vida continúa y hay que salir a pelear igual.
Para Andrea el tango le hace bien porque, como bien dice apenas comienza su monólogo en una esquina sentada frente a un espejo mientras suena un bandoneón, se maquilla y se prepara para la función “el tango te espera” y muchas veces no te suelta más. “Me hizo muy bien como mujer, es una dinámica distinta, estas conectada con el otro, con cosas que te pasan en la vida. Siempre digo que el tango es la vida misma” Y por eso, como actriz, como artista y como persona decidió darle sentido a esta Madame Tango, porque el tango se baila de a dos, pero esta vez la protagonista es ella.
Pero primero tuvo que escribir y reescribir, analizarse y tratar de ver su vida, y así comenzó este espectáculo, con un bailarín y un bandoneón pero que después tuvo la oportunidad de sumar a una orquesta en vivo dirigida por Pablo Valle, de quien dice que es “un placer tenerlo, compartir el escenario con del y su disposición de hacer lo que sea, fue muy acertado”.
Por último, da un pantalla sobre qué es Madame Tango y por sobre todas las cosas, quién es: “todo es Madame Tango, son cosas que me fueron pasando a través de años de investigación, de ir a milongas, de vivencias, de las raíces del tango, es ponerse en la piel de cuando uno está en la vida cotidiana y dice ‘esto funcionaba de esta manera y esto como cambia en este nuevo paradigma’, desde ahí que se fue gestando la obra.
“Es una investigación mía que tiene que ver con que en esta vida nada se consigue solo, en un lugar precisas de los demás para lo que sea, para nacer, para tus primeros años de vida y ahí es que es parte de esta relación y con el vínculo que tiene mucho que ver con la clave de la vida”, remarca.
Madame Tango hoy es ella, es Andrea Ghidone, pero también podes ser vos o aquella mujer. Es una mujer que reencarnó en grandes tangueras y que hoy decide ponerse en ese rol Ghidone. Y lo bien que le queda.