Por la baja en las retenciones el campo se queda con 20 mil millones de pesos
La baja en las retenciones para la exportación de soja y aceite le pertimirá quedarse al campo con 20 mil millones de pesos de impuestos que iban a las arcas del estado. El costo fiscal será de $40 mil millones mientras que el ajuste en el pago de jubilaciones, pensiones y AUH llevó a un achique de $56 mil millones.
Tras crear un nuevo "ahorro" fiscal a costa del achique a las jubilaciones y las asignaciones universales por hijo, el gobierno nacional le bajó los impuestos a los empresarios sojeros. Las exportaciones pasarán a pagar 6% menos a finales de año, con una baja mensual del 0,5% en búsqueda de "revertir la caída en las ventas al exterior del complejo sojero".
Cabe remarcar que aa retención que tenía un porcentual entre el 27 y el 30% en el mes de diciembre llegará a estar entre el 15 y el 18% al cierre del próximo año. El "costo fiscal" de la medida está en torno a los $ 20.000 millones solo en 2018 y justamente de ese monto unos $ 6.000 millones dejarán de recibir las provincias.
Este dinero se distribuía a través del Fondo Federal Solidario, que otorga un 30% de las retenciones a la soja para las distintas provincias.
Los decretos 1343/16 y 1025/17, establecen que el objetivo oficial es alcanzar un sistema de convergencia entre los porcentajes de retenciones para todos los subproductos del complejo sojero. Además bajan las del poroto de soja y del aceite de soja; y se quitan las móviles al biodiésel, que están en poco más del 0%, y se reemplazan por retenciones fijas del 8%.