En lo que va del macrismo cerraron 400 restaurantes porteños
El aumento de los costos combinado con la caída en las ventas es una ecuación peligrosa para cualquier negocio, pero en el rubro gastronómico porteño es letal.
A mediados de mayo, Verónica Sánchez, presidenta de la Cámara de Restaurantes , advertía sobre la brutal caída en la rentabilidad de esos negocios, producto de la mencionada combinación de suba de costos y caída de ventas.
Ahora, la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (AHRCC) y la Unión de Trabajadores de Hoteles y Gastronomía (Uthgra) aseguran que ya se vive una "situación de emergencia y crisis" en el sector.
De hecho, en lo que va del año cerraron sus puertas unos 400 restaurantes sólo en la Capital Federal, y no aquellos de poco tiempo de inaugurados sino, justamente, aquellos con varios años y tradición en el rubro.
La suba de costos a raíz de la suba de alquileres y tarifazos de por medio, y la caída en las ventas por la devaluación del salario, causaron que la rentabilidad cayera del 15 pro ciento, en 2011, al 2 por ciento en la actualidad. Es decir: una insostenible continuidad.