En el año de la caída del empleo, Macri recortó los programas que ayudan a evitar despidos
El Centro de Economía Política Argentina (CEPA), señalaron que el Programa de Recuperación Productiva (REPRO) han tenido un recorte de dos tercios durante el año pasado, comprado con 2015, de $1.174.092.576 a $359.756.000.
El corte neliberal del gobierno de Cambiemos se aprecia nuevamente en la retracción del Estado en materias de políticas que ayuden a corregir los problemas económicos. Desde la asunción de Cambiemos, los REPRO (Programa de Recuperación Productiva sostenido por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social -MTEySS-) han tenido un recorte significativo, dedicándole en recursos menos de un tercio de lo aplicado en 2015 (de $1.174.092.576 a $359.756.000 en 2016), alertó un informe del CEPA publicado este lunes.
Pese a que desde el micrófoco, el Presidente aseguró que "todo el tiempo estamos viendo qué podemos hacer para mantener el empleo", se aprecia que lejos de aumentarse el presuuesto para paliar la ola de despidos, el mismo se achicó.
"Lo mismo ha sucedido con la cantidad de prestaciones (cantidad pagos totales en concepto de REPRO). De un total de 756.487 en 2015, se redujeron a 123.056, una merma de 84%. También se vieron reducidas la cantidad de empresas alcanzadas: de 402 en 2015 a 89 en 2016, una disminución de 79%", alerta el mismo informe.
Desde el CEPA explican que el compartamiento del REPRO con el gobierno anterior era "a menos empleo, mas REPRO, y viceversa". El dato se verifica, por ejemplo, en la crisis internacional de 2009, donde se incrementas los REPRO para frenar los despidos en el mercado interno.
Sin embargo, durante 2016 "sucedió lo contrario: el empleo se retrae y lo mismo ocurre con montos y prestaciones de REPRO", explican en el informe.
"La variación de trabajadores registrados tiene valores negativos por primera vez en todo el periodo analizado, de 0,79%, y el REPRO deja de funcionar como herramienta contracíclica: sufre una profunda caída de la variación real de los montos liquidados en REPRO, de 76,94%", advierten.
Entre sus consideraciones finales, el CEPA concluye que "el eje conductor de la política laboral del gobierno de Macri sigue una línea de significativa coherencia: en la medida en que el derecho al trabajo consiste en la intromisión de un orden público y social en favor de los trabajadores, entre las relaciones jurídicas conformadas por el mercado, las políticas del macrismo niegan esta esencia y conforman una suerte de doctrina de abolicionismo laboral".
El CEPA advierte además que el gobierno de Macri invirtió el objeto receptor de la ayuda estatal. Si bien hay subsidios que desde la lógica del oficialismo deben suprimirse, hay otros que el propio macrismo considera válidos. Así por ejemplo el Repro, que implica ayudar a la empresa en una situación de crisis mediando la obligación de no despedir personal implica la transferencia de recursos estatales de manera directa a los trabajadores, lo cual favorece la posición relativa de los trabajadores ante la situación de dificultad de la empresa.