Desde 2002, más de 11 millones de consumidores volvieron a la clase media
Los datos los reveló el titular de la Consultora W durante una disertación en la Universidad de Palermo. Guillermo Oliveto destacó la reciente “recuperación moderada” de la economía argentina. También habló de expectativas y confianza del consumidor.
“La Argentina experimentó un proceso de movilidad ascendente desde 2002, y más de 11 millones de consumidores regresaron a la clase media”, confió el especialista en análisis de tendencias de consumo y mercados, Guillermo Oliveto.
El titular de la Consultora W, a quién no puede tildarse de oficialista -basta con ver sus informes-, destacó además la reciente “recuperación moderada” de la economía.
El informe se basó en la venta de autos, motos, electrodomésticos, entre otros rubros, y juzgó probable que el conjunto de las capas medias “experimente una expansión de siete puntos en lo que queda del decenio”.
Además, Oliveto hizo estas declaraciones durante una disertación en la Universidad de Palermo, organizada por la Cámara Industrial de la Indumentaria.
Allí, recordó que la mitad de la población se ubicaba en la clase “baja” tras el quiebre de la convertibilidad, mientras 20% pertenecía a la clase “media baja”.
Aumento del empleo
Por el aumento del empleo y el salto del Producto Interno Bruto, en la actualidad sólo 14,7% de los consumidores pertenece al estrato bajo (con ingresos familiares mensuales de 3.950 pesos), y 32% al medio bajo (8.500 pesos por mes), agregó el analista.
Según Oliveto, el proceso de mejora de los últimos años alcanzó a los segmentos más favorecidos, y hoy el 18% de los consumidores pertenece a la clase “media alta”, con ingresos familiares superiores a 34 mil pesos mensuales.
Mientras, en el tope de la escala, la clase “alta”, con más de 107.500 pesos de ingreso familiar por mes, agrupa al 5,1% de los consumidores.
De confianza y expectativas
El consultor resaltó el repunte en los índices de confianza del consumidor en lo que va de 2015, luego de la retracción sufrida durante el año pasado.
Sostuvo después que el nivel de incremento de salarios, situado este año en torno del 30% promedio, supera la inflación prevista (de 25%, según distintos cálculos), “lo cual implica que se recupera lo perdido en 2014”.
En materia de perspectivas, Oliveto atribuyó mayores perspectivas a una “política gradualista, en vez de una de shock”, lo que implicaría una inflación en descenso pero “en altos niveles por dos o tres años”.
“La chance de un ajuste ortodoxo es compleja, porque la población espera no perder lo recuperado, mantener su calidad de vida y su condición de clase, y hacer rendir su poder adquisitivo”, concluyó el experto.