Yair Raziel Rodríguez Portillo no sólo es la máxima promesa de las MMA mexicanas, sino que es el apuntado a ser el primer campeón habla hispana dentro de UFC. Arribó a la empresa tras coronarse como el ganador del primer The Ultimate FIghter Latinoamerica, el reality show histórico de la compañía estadounidense.  

Precisamente, en agosto próximo saldrá al aire el TUF Latinoamerica 3 –que se grabó en Argentina– y Yair nos comentó lo que representó su experiencia personal en el reality.

El momento de levantar el trofeo del TUF Latinoamerica

"La primer enseñanza que te deja esto es que a pesar que estas rodeado de gente, estás solo. Tienes que aprender a conocerte a ti mismo, saber si en realidad lo quieres porque es un deporte muy difícil y es un camino solitario. Tu solo es el que te tienes que empujar, tu eres solo el que se tiene que fijar tus metas. De eso me sirvió. Conocerme a mi mismo, como atleta, como persona, como peleador", analizó Rodríguez.

"Me di cuenta que mi lazo con mi familia es muy fuerte, algo que yo no veía tan fuerte anteriormente. Adentro me di cuenta que no sólo se hacen amigos, también se pueden hacer hermanos de otras madres", destacó el oriundo de Parral. Palabras con las que seguramente coincidirán Marcelo Rojo y Javier Ganín, representantes argentinos de esta edición.

Desde entonces, sumó cuatro combates ganando todos ellos. Su última presentación fue la mejor: noqueó a Andre Fili con una patada voladora en el segundo round, demostrando un poco de todo lo peligroso que puede ser. Sin embargo, 'La Pantera' mantiene los pies firmes en la tierra y no se deja guiar por los elogios que le llueven de todos lados.

"Mi meta es ganar mi próxima pelea, y la siguiente va a ser ganar la siguiente. Solamente así voy a poder llegar a mi sueño mayor, a mi meta mayor que es ser campeón del mundo. Y no solamente eso, mi mente va más allá de ser solamente campeón. Me sería vacío sólo tener el cinturón. Yo quiero dejar un legado en esta vida. Que la gente siga mis pasos por el buen camino. Que en paz descanse Mohammad Ali, que fue uno de mis ídolos y pioneros del MMA también, yo quisiera ser alguien así. Alguien que le enseñe a la gente que se puede", se sinceró Rodríguez, artista marcial de apenas 23 años.

Con la humildad a flor de piel, Yair evita las comparaciones y repite una y otra vez que quiere hacer su propio cambino tanto en el octágono como en la vida. "No quiero ser el Julio César Chavez, mis respetos para él, tampoco quiero ser el 'Canelo' ni Jon Jones. Yo quiero ser Yair Rodríguez. Que la gente me recuerde como Yair Rodríguez, no como otro. Quiero que a los grandes los comparen conmigo, hasta allá van mis metas, Mi mente no tiene límites", afirma, convencido.

Yair Rodríguez | Peleadores

Ante la gran cantidad de rumores que hay sobre su próximo combate y la ansiedad de los fans por volver a verlo en la jaula, Rodríguez se mantiene al margen y nos contó qué es lo que tiene en mente.

"No hay fecha ni rival, no hay nada todavía. Me están mencionando algo de por agosto. Ando viajando por todo el mundo asi que no se. No se si sería una buena idea opción tomar la pelea en agosto. Estamos a corto tiempo, un campamento requiere de tiempo y dedicación. No me gustaría tomar una pelea a corto tiempo. Si hay que hacerlo, hay que hacerlo verdad, pero no me gustaría, se vería reflejado en mis resultados. No me gustaría porque tengo metas fijadas", manifestó con la frialdad de los grandes peleadores.

"Empecé a los cinco años en taekwondo, fue una decision de mis padres meterme a una disciplina porque tenia mucha energia, al igual que mi hermano, que eramos un poquito desastrozos en la casa. nos ayudó a nosotros y los ayudó a ellos con los tiempos", cuanta con absoluta naturalidad el prospecto mexicano de mayor potencial dentro de las artes marciales mixtas.

A su relato le agregó más detalles de cómo fue su formación como peleador: "Duré ocho años en taekwondo, tiempo que ha sido crucial en mi vida, y hasta la fecha me ha servido mucho. Me ha enseñado no solamente a ser un buen atleta, sino ser una buena persona tambien. Después estuve en judo por dos años, un deporte muy bonito que tuve la oportunidad de practicar. Después de eso estuve en boxeo, karate y kickboxing".

"Lo tuve muy claro desde que empecé a entrenar. Todavía ni siquiera peleaba y yo ya sabía que me quería dedicar a esto. Siempre decía: 'Si hay una manera posible de poder vivir de esto, yo lo voy a hacer. Quiero hacer esto'. Estaba en la preparatoria, recuerdo, y le dije a mis padres 'voy a empezar a pelear'. Y ellos no sabían de qué se trataba porque es algo practicamente nuevo este deporte. Mi mamá me dijo 'que deporte tan feo , que fuerte'. Era la primera impresión, más antes. Luego, ella me dijo: 'Si es lo que tu quieres hacer, yo te voy a apoyar al 100%'".

Una decisión de vida tan importante requiere del apoyo de tus seres queridos, y eso fue lo que le pasó a 'La Pantera'. Si bien al principio estaban los temores lógicos, luego del primer combate no quedaron dudas.

Yair recuerda que aquella pelea ante Jonatan Guzman, que la ganó por decisión unánime, marcó un antes y un después en su vida. "Después de la primera pelea que tuve a los 18 años en Parral, mis padres se quedaron enamorados del deporte, de cómo se desenvolvía, que no era una pelea callejera, sino que subían dos atletas a dejar todo. Desde entonces les ha encantado, se han enamorado del deporte al igual que yo".

Yair "El Pantera" Rodriguez Highlights || by Ninja [HD]

"Argentina está muy bonito, me encantó. Yo esperaba que fuera más calentito, me dijeron al último día llevate una chamarra porque va a estar frío. Estando aquí es casi invierno por el frío". Hay que decir que Yair apenas portaba una remera y una campera finita, como si estuviésemos en plena primavera.

"Las mujeres son muy muy guapas. Todo el mundo me presumía que las mujeres de Argentina eran muy guapas, y ya me di cuenta que sí lo son. La gente muy cálida. Yo tengo un amigo aquí, Guido Canetti –participante del primer TUF Latinoamerica y actual peleador de UFC–, y su hermano Bruno. Personas que te reciben con los brazos abiertos, excelentes todos", aseguró con una sonrisa.

Y, como era de esperarse, no podía pasar por estas tierras sin probar la comida característica. "Tuve la posibildad de comer un asado y me gustó mucho. Comí, ¿cómo se dice? ¿Molina? ¡Morcilla! Es que no me sé los cortes, jaja. La verdad que me gustó mucho Argentina", cerró entre risas el mexicano, quien vive su sueño día a día.