El boxeador David 'El Terry' Acevedo falleció por consecuencia de los golpes recibidos ante Nelson Altamirano en una pelea el sábado 14 de noviembre en Nicaragua.

El púgil de 23 años perdió por nocaut en el octavo round y tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital Salud Integral de Managua, en donde estuvo bajo cuidados intensivos hasta que perdió la vida.

Los periodistas que presenciaron la pelea aseguran que el árbitro debió haberla frenado antes, ya que se notaba una gran diferencia entre ambos rivales y no era necesario llegar a que el perdedor cayera desvanecido en el ring.

Éste era el tercer combate que llevaba a cabo el joven en los últimos 49 días, y su padre y entrenador explicó que Acevedo "había estado mucho tiempo inactivo y necesitaba mejorar su récord" y contó que no tiró la toalla, porque "los dos boxeadores estaban agotados y los golpes que se daban no eran fuertes".

La noticia ha impactado duramente en el país centroamericano, ya que el boxeo es el segundo deporte más practicado de la nación después del béisbol.Yamil, hermano de Acevedo, contó que el púgil había perdido 10 libras (4,5 kilos) en menos de 24 horas para poder entrar en la categoría de las 147 libras (66,6 kilos), lo que provoca una baja en el rendimiento y el físico de cualquier persona.

Ahora, los entrenadores y boxeadores le recomiendan a la Comisión Nicaragüense de Boxeo Profesional (CONIBOP) que se realice un chequeo permanente del pesaje de los peleadores, antes de cada pelea, cómo lo realizan las Federaciones que rigen el boxeo mundial.

Rosendo Álvarez, promotor de la velada, declaró que: "Los boxeadores son quienes piden pelear seguido y que les pacten las peleas a más round para ganar más dinero". El joven pugilista peleó para ganar 4.000 córdobas (unos 145 dólares).

El dolor se apoderó de todo el mundo boxístico. Llegó el momento de los replanteos y de la toma de decisiones fuertes.