Riquelme y Gallardo ovacionados en la despedida del 'Chino' Recoba
Mirá el acalorado recibimiento de los hinchas de Nacional para Román y el 'Muñeco' -campeón como jugador y técnico-, cuando saltaron a la cancha para jugar en la despedida del uruguayo más ganador de los últimos tiempos. Entre figuras de la talla de Valderrama, Zanetti y Zamorano, el 'Chino' entró último y el estadio explotó.
Anoche una multitud despidió en Montevideo a Álvaro Recoba, el jugador uruguayo más ganador de los últimos tiempos. Entre los invitados internacionales, además de glorias del fútbol uruguayo y hasta el presidente de la Nación para dar el puntapié inicial, estaban Valderrama, Zamorano, Toldo, Zanetti, y los locales D'Alessandro, Riquelme y Gallardo, que viajó con Tabaré Viudez e Iván Alonso.
Román amargó a Nacional en la Copa Libertadores de 2012, cuando Boca con un hombre menos le ganó 1 a 0 en Montevideo y lo dejó afuera de la segunda ronda. Pero el paladar de los uruguayos que fueron a despedir a Álvaro Recoba, reconoció la magia de Riquelme, que durante el partido picó un penal.
"Muñeeecooo... Muñeeeecooo", coreó el Gran Parque Central, donde Gallardo se coronó campeón como jugador e hincha.
Así explotó el estadio cuando apareció el protagonista de la noche
No fue una noche más para Nacional, se retiró el niño mimado de la casa, el ídolo total. Hubo show de luces, espectáculo aéreo y hasta estuvo el presidente. Claro, cantó la murga Don Timoteo -Recoba suele aportar para trajes y logística de algunas murgas en carnaval-, y luego se jugó un partido entre amigos del 'Chino' y Nacional.
El partido se paró para mirar por la pantalla los saludos de grandes figuras mundiales -entre ellas Luis Suárez-, que al no poder estar en Montevideo, enviaron sus saludos al ídolo.
Recoba ganó con Nacional 6 títulos, se fue a Italia y se coronó en Inter. Allí jugó 9 temporadas, donde obtuvo 7 títulos -entre ellos la Copa UEFA-.
Eran épocas dónde él y Paolo Montero -en Juventus-, venían a Sudamérica para representar a Uruguay en equipos pobres, donde ellos debían cargar con todo el peso de la historia del paisito. Por eso los reproches, las exigencias y críticas hacia su zurda mágica.
Y un día volvió a Montevideo y a su querido Parque Central, donde estaba su familia.
Con la 20 en la espalda, ganó un par de clásicos con su pegada, entrando desde el banco -cuando Gallardo era técnico-, y un día anunció que el siguiente sería su último torneo.
En ese último título, el Apertura 2014 y el torneo uruguayo 14-15, el 'Chino' fue clave para alzar el trofeo en un final palmo a palmo con Peñarol.
Quedará en la historia la tarde del 9 de noviembre de 2014: Nacional perdía el clásico hasta los últimos minutos. Iván Alonso lo empató sobre la hora y el Chino -¡Síii Recoba lloró aquella vez el relator!- de tiro libre en el último minuto adicionado desató una locura pocas veces vista en un Centenario exultante de un lado, y atónito del otro.
¿Cómo no lo van a querer así? Por siempre.