Riquelme habló de la salida de Tevez, de su partido despedida y le pegó a Angelici
El máximo ídolo de la historia de Boca rompió el silencio y habló de todo este viernes. Román insistió en que los hinchas 'xeneizes' no terminan el 2016 "contentos", a pesar de ir punteros en el torneo, porque el club no clasificó a la Copa Libertadores 2017. Opinó que "Carlitos es irremplazable" y le pasó factura al presidente.
"Yo soy hincha de Boca, y nosotros no estamos contentos porque no vamos a jugar la Copa. Estamos molestos, no vamos a jugar la Copa Libertadores, y Boca tiene la obligación de ganar ese torneo", enfatizó en una entrevista con Fox Sports el futbolista que ganó tres de los seis máximos títulos continentales que tiene el club de la Ribera.
También recordó que los hinchas tenían "mucha ilusión" en "llegar a la final de la Copa Libertadores" de este año, por lo que no se van "a conformar" con haber "terminado la primera ronda del torneo local primeros".
Sobre la partida polémica de Carlos Tevez a China, consideró que el 'Apache' "es irremplazable" y deseó que "si él está contento, ojalá que pueda disfrutar de jugar en China mucho tiempo, o el tiempo que sea".
De todos modos, dejó en claro que él "nunca" se quiso "ir de Boca", al que consideró "lo más grande del mundo". Román explicó su sentimiento: "Nunca me quise ir de Boca. Es una maravilla. Es el club más importante del mundo. Tuve la oportunidad de jugar en el Barcelona y Boca es lo más grande del mundo. Tiene un estadio que se mueve", señaló quien finalizó su carrera en Argentinos Juniors.
Tras el año sin títulos, Riquelme dijo que "hay que tener mucha confianza en el entrenador, en que pueda armar bien el equipo y pueda cada vez jugar mejor".
"Deseo que Guillermo (Barros Schelotto) con Gustavo (Barros Schelotto) puedan armar un gran equipo, que Boca pueda ganar y que yo pueda disfrutar cada domingo como hincha", opinó sobre el actual cuerpo técnico.
Finalmente, confirmó que su postergado "partido despedida si Dios quiere va a ser en diciembre", y aseguró que siente "vergüenza" por tanto cariño recibido.
"El partido despedida si Dios quiere va a ser en diciembre. Me da un poco de vergüenza, no sé si merezco ese tipo de cosas. Yo soy un afortunado, la gente me quiere más de lo que me tendría que querer. Hicieron 32 encuestas, gané las 32. Un día me van a hacer perder. La gente me quiere mucho", se emocionó Riquelme.