La atención mundial que generan los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014, convierte el evento ruso en un espacio muy importante para transmitir conceptos de defensa de derechos para las sociedades.

Este comercial noruego, a pesar de la participación de hermosísimas modelos y no de las chicas gay de la vida real, intenta romper el desprecio por la libre elección de vida sexual, impuesto a través de leyes anti gay en el país anfitrión.

Se trata de una nueva campaña para disuadir al gobierno ruso de parar con la discriminación y promover la convivencia pacífica entre competidores para promover la tolerancia y el respeto.

La marca de ropa deportiva XXL All Sports United ataca directamente a la prohibición hacia la propaganda gay que impone el Kremlin y se suma a las críticas de las organizaciones de Derechos Humanos rusas contra las políticas homofóbicas.