Lo que dejó el primer día de la apasionante final de la Copa Davis, con Tsonga y Goffin como figuras
Los respectivos líderes de cada equipo, Jo-Wilfried Tsonga y David Goffin, ganaron sus partidos individuales, este viernes en el primer día de la final de la Copa Davis, y dejaron el Francia-Bélgica en Lille con empate provisional 1-1.
En el primer partido de la final, David Goffin, finalista el pasado domingo del Masters (derrota ante Grigor Dimitrov), confirmó su gran estado de forma y batió a Pouille en dos horas exactas (7-5, 6-3, 6-1). Hasta ahora, el tenista galo había ganado los tres partidos entre ambos este año.
Tras ganar a Rafael Nadal y Roger Federer en Londres, se mostró imbatible ante Pouille, exhibiendo gran confianza en su tenis. Luego de aguantar los nueve primeros juegos, Pouille se hundió debido a sus numerosos errores directos. Imperial al resto, Goffin, de 26 años, aceleró en la segunda manga.
Ayudado también por un servicio eficaz (12 aces), aplicó su plan de juego al pie de la letra y se mostró cada vez más superior según pasaron los minutos.
"He acercado un poco la Ensaladera hacia la frontera. Un poco, porque pesa mucho", bromeó Goffin tras su partido. "He hecho un partido completo de principio a fin. Estoy muy contento de haber permitido esta entrada en la final a mi equipo", añadió el tenista valón.
El sábado, el partido de dobles determinará cuál de los dos países llega con ventaja al domingo, día en el que se conocerá el campeón. Inicialmente, ese duelo de parejas debería enfrentar a los locales Richard Gasquet y Pierre-Hughes Herbert contra los visitantes Ruben Bemelmans y Joris De Loore, pero los capitanes de ambos equipos, Yannick Noah y Johan Van Herck, pueden introducir cambios en sus duplas.
Bélgica busca este fin de semana su primer título en la Copa Davis, dos años después de perder la final ante Gran Bretaña.
Tsonga apareció para salvar al local
Bélgica se había adelantado tras el primer partido, en el que Goffin, séptimo del mundo, había vencido al local Lucas Pouille (N.18) en tres sets. Asi que Tsonga (N.15) tenía la presión de corregir el rumbo y lo hizo, con seriedad y sin dudar, en 1 hora y 46 minutos, a Steve Darcis (N.76) por un contundente 6-3, 6-2 y 6-1.
Gracias a ese claro triunfo, Francia puede seguir confiando en sus opciones en busca de un décimo trofeo en la Copa Davis, un objetivo que se le escapa desde 2001, pese a haber disputado tres finales (2002, 2002, 2014) desde entonces. El sábado, con el partido de dobles, intentará hacer valer su estatus de favorito.
En su primer enfrentamiento contra Darcis, al que conoce desde su adolescencia, Tsonga empezó algo tímido con el servicio. Obtuvo ya sus dos primeras bolas de break en el cuarto juego, aunque tuvo que esperar al final del set para lograr romper el saque de su rival, en su cuarto intento, para ponerse 5-3 a favor y luego poder apuntarse la manga con su saque.
En el segundo set, Tsonga estuvo ya más sólido, obligando a Darcis a retrasarse al fondo de la pista. Con dos breaks de entrada, el francés se colocó ya con un 4-0 que le permitió gestionar bien el set, antes de llevárselo por 6-2. El tercero fue todavía más cómodo y Darcis únicamente pudo ganar allí un juego, contra un Tsonga muy seguro de sus posibilidades.
El ganador de esta final sucederá en el palmarés a Argentina, que se coronó hace un año en Zagreb ante Croacia, pero que en este 2017 fracasó al caer en primera ronda ante Italia y luego descender a la segunda categoría al ser derrotada en un repechaje en Kazajistán en septiembre.