La Justicia ordenó interrumpir un partido entre Joinville y Portuguesa, válido por la primera fecha de la segunda división del Campeonato Brasileño, debido a un pleito judicial que este último club mantiene con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

Sorpresivamente, un oficial de Justicia ingresó en la cancha del estadio Arena Joinville cuando corrían 17 minutos de juego y ordenó que Portuguesa se retirara del campo.

La suspensión del choque ocurrió porque el jueves, un tribunal aceptó un recurso interpuesto por Portuguesa y ordenó que se le restituyeran al equipo los cuatro puntos que le fueron quitados el año pasado. Por este motivo, al menos en forma provisoria, el equipo quedaría en la primera división del Brasileirao, que se inicia este fin de semana.

La sanción había sido ordenada por el Supremo Tribunal de Justicia Deportiva (STJD) debido a que el club alineó a un jugador que estaba en situación irregular.

La pérdida de los puntos le valió al “Lusa” el descenso a la B y permitió que el Fluminense se mantuviera este año en la primera división.

Los árbitros suspendieron el partido y la CBF deberá decidir su reprogramación. Durante toda la semana, el equipo amenazó con no entrar al campo este viernes, hasta que su presidente Ilídio Lico confirmó jugarían.