El zaguero central de Brasil abandonó muy emocionado la cancha del estadio Mineirao, de Belo Horizonte. Pero antes tuvo tiempo para expresar toda su frustración e impotencia ante la victoria aplastante de Alemania por 7 a 1.

"Quería ver a mi pueblo sonreír", dijo con los ojos llenos de lágrimas el nuevo jugador del París Saint Germain francés.

David Luiz admitió que los jugadores alemanes "fueron los mejores, se prepararon mejor", y de su parte afirmó que el de hoy fue "un día con mucha tristeza, pero de mucho aprendizaje".