Cosas así no se ven todos los días. Una típica situación ventajera del fútbol sudamericano ocurrió este miércoles en el fútbol de Georgia.

El árbitro le marcó a un volante del FC Dinamo Tbilisi que le devuelva la pelota al conjunto rival, el FC Sioni Bolnisi. Por lo tanto, éste obedeció, pero con un pequeño desliz: pateó con demasiada altura el balón y marcó un golazo por encima del arquero rival.

Inmediatamente, todos los jugadores de la visita le recriminaron su acción, por lo que los futbolistas locales decidieron, en un gran gesto, darle todas las libertades al Sioni Bolnisi para empatar el partido.

Lo más curioso es que luego el partido continuó con la seriedad de siempre y el equipo que había sacado ventaja de una jugada “fair play” terminó perdiendo el partido por una gran definición de un delantero rival.