Juan Mercier recibió una desagradable noticia durante el fin de semana: su hijo Franco Vieira, de 17 años, fue salvajemente agredido en un boliche de la costanera porteña. Por suerte para el jugador de San Lorenzo y toda su familia, el joven puede contarlo.

Y en la tarde del lunes se conocieron las primeras imágenes del desfigurado rostro de Franco, con su camisa y su cara bañadas en sangre. Otro lamentable episodio entre la gente que debería cuidar a nuestros hijos y que, lejos de ello, los terminan golpeando.