El semanario francés afirmó en un reportaje de 20 páginas que la FIFA, el gobierno francés de aquel entonces y el presidente de la Unión Europea del Fútbol Asociado (UEFA), Michel Platini, y el ex jugador Zinedine Zidane están involucrados.

En el centro de la polémica está una supuesta cena que mantuvieron el 23 de noviembre de 2010 en el palacio del Elíseo, sede de la presidencia francesa en París, pocos días antes de la votación para el Mundial.

El presidente del gobierno en aquel entonces, Nicolás Sarkozy, recibió a Platini, al Emir de Qatar, Sheikh Hamad Al Thani, y al por aquel entonces presidente del Paris Saint-Germain, según "France Football".

A cambio del voto de Platini, los qataríes invertirían dinero en el fútbol francés, agregó el semanario. La empresa Qatar Short Investments compraría meses después el PSG, fichando a numerosas estrellas. Además, adquirió los derechos del fútbol francés.

"France Football" pidió que se anulase el voto del presidente de la UEFA, Platini, que rechazó las acusaciones y habló de una "red de mentiras".

"Pensar que mi voto para Qatar 2022 se hizo sobre la base de acuerdos con el estado francés y con Qatar, no es más que pura especulación", dijo Platini, negando rotundamente los dichos en su contra, según publican medios locales.

El francés no descartó emprender acciones legales "contra cualquier persona" que cuestione su voto.

Qatar superó el 2 diciembre de 2010 en la votación a Australia, Estados Unidos, Japón y Corea del Sur al conseguir 14 frente a los 8 de los favoritos, los estadounidenses.

Poco después de la entrega del torneo, el ex vicepresidente de la FIFA Jack Warner hizo correr el rumor de que cuatro miembros del comité recibieron un total de 20 millones de dólares a cambio de votar por Qatar: el camerunés Issa Hayatou, el paraguayo Nicolás Leoz, el argentino Julio Grondona y el guatemalteco Rafael Salguero.