Francia fue muy superior y goleó 5-2 a Suiza, posible rival de octavos
Los franceses aprovecharon todos los errores que les regalaron los suizos y ganaron cómodamente por 5 a 2. Giroud, Matuidi, Valbuena, Benzema -que erró un penal- y Sissoko marcaron los goles. En tanto, Džemaili y Xhaka achicaron la diferencia, a poco del final. Si se dan los resultados, Suiza podría ser rival de Argentina en octavos de final.
El partido se resolvió en el primer tiempo. Y si hacemos un trazado fino, Francia liquidó el juego entre los 17 y los 41 minutos de juego, lapso en que marcó los tres primeros goles y sentenció el encuentro.
Desde el amanecer del cotejo, Suiza arrancó con el pie izquierdo. El central Steve Von Bergen tuvo que salir reemplazado por un corte en la ceja. En su lugar entró Senderos, que hizo agua por todos lados.
El conjunto de Ottmar Hitzfeld se mostró desatento y impreciso en los primeros minutos. Situación que provocó diversos contraataques del conjunto francés. Benzema y Giroud recibían a espaldas de los volantes y los volantes 'galos' se sumaban al ataque con absoluta naturalidad.
Y así llegó el primer martillazo al partido. Tras un córner desde el sector derecho, Giroud ganó con total comodidad en el aire y con un potente cabezazo esquinado abrió el marcador.
Festejo en el banderín, dedicatoria a la familia y a volver a su propio campo. Acción siguiente, Suiza saca del medio, Behrami se la regala a Benzema, éste levanta la cabeza y asiste a Matuidi. Ya en el área de los suizos, el hombre del PSG pateó al palo del arquero, quien tuvo una pésima reacción. Hitzfeld se tomaba la cabeza.
En un minuto, Francia logró una importante diferencia y a partir de allí comenzó a jugar a placer.
A pesar de algunas insinuaciones por parte de los principales fabricantes de relojes, diez minutos después Djourou le cometió un penal infantil a Benzema. El propio centrodelantero del Real Madrid tuvo en sus pies la chance de poner una cifra definitiva al encuentro, pero Benaglio contuvo el remate.
Increíblemente, el rebote le cayó justo al volante Cabayé, quien con todo el arco a su placer estrelló su disparo al travesaño.
Lejos de ser un punto de inflexión en el partido para los suizos, los muchachos de Hitzfeld siguieron cometiendo errores fatales, regalando marcas y espacios por doquier.
Córner mal pateado es gol del rival. Dicha máxima se aplicó en el tercer tanto francés. En tres toques, los de Deschamps llegaron al área rival para que Giroud asista a Valbuena y éste le dé un pase a la red. Partido liquidado.
El segundo tiempo fue todo un monólogo francés. Suiza bajó los brazos y los 'galos' soltaron el pie del acelerador.
De todas maneras, los suizos siguieron comitiendo errores significativos en defensa. Esto permitió que Francia no sólo goleé, sino que se florezca.
Tras una serie de pases consecutivos, y una importante pifia de Senderos, llegó el cuarto. Su autor fue Karim Benzema, de volea. Con este tanto, alcanzó a Muller, Robben y Van Persie en lo más alto de la tabla de goleadores.
Un rato después, Sissoko subió el quinto gol al marcador, tras un jugada similar. Los franceses la manejaron de izquierda a derecha, sector por donde llegó por sorpresa el jugador del Newcastle United inglés para luego definir cruzado.
En ese momento, el partido era una auténtica paliza. Un resultado totalmente inesperado en la previa. Si bien Francia es superior desde las individualidades, Suiza había mostrado sus credenciales en el triunfo ante Ecuador.
Pero en el cierre del encuentro, apareció el orgullo de los jugadores suizos. Tratando de alivianar semejante papelón, fueron en búsqueda del descuento. Y llegó nomás. Dzemaili achicó la diferencia con un gran tiro libre rasante, que venció al arquerro Lloris, a pesar de su esfuerzo. Luego, Xhaka redujo cifras nuevamente con un gran gol de volea, tras asistencia del capitán Isner.
Los tres goles de diferencia eran un tanto mentiroso con relación a cómo fue el desarrollo del encuentro, pero en la última jugada del encuentro ocurrió algo pocas veces visto.
Francia tocaba a placer, dándole a entender al árbitro holandés que debía terminar el cotejo. Pero el referí eligió el momento menos indicado. Las cámaras se fueron con el banco francés y el abrazo de Deschamps con sus asistentes, cuando Benzema marcaba otro golazo (el segundo en su cuenta personal). El jugador del Real Madrid hizo 'la gran Keko Villalba': festejó como loco, pero el juez ya había finalizado el encuentro. ¡Sí, insólto! Quedará como una buena anecdota.
Toda da a entender que Francia conseguirá el primer puesto en su grupo y evitará a la Argentina en octavos de final. En tanto, Suiza, Ecuador y Honduras aún aspiran a adjudicarse esa segunda plaza que les permita la clasificación a la siguente fase.