"Nos tenemos que adaptar a lo que la FIFA quiera hacer. Yo tengo mis sensaciones: creo que en esta jugada concreta fue un poco confuso", manifestó Zidane en referencia al segundo gol del equipo madrileño convertido por el portugués Cristiano Ronaldo en la victoria por 2-0 en la semifinal.

En dicha acción, el árbitro paraguayo Enrique Cáceres demoró 180 segundos en validar el tanto por una supuesta posición adelantada de "CR7".

"A lo mejor las cosas tienen que ser más claras. Pero la tecnología con la que quieren mejorar las cosas... ésto no lo podemos controlar", agregó el entrenador en la conferencia de prensa posterior al encuentro.

El mediocampista croata Luka Modric, quien también participó de la rueda de prensa, fue más contundente: "para ser honesto, no es fútbol y no me gusta".

"Espero que esta regla no continúe porque creó mucha confusión. La primera sensación no es buena", completó Modric, quien fue elegido la figura del partido para la organización del torneo.

Por último, el delantero francés Karim Benzema y Lucas Vázquez también se refirieron a la polémica prueba que impuso la FIFA. "No me gusta porque cambia el fútbol", puntualizó Benzema, mientras que Vázquez expresó: "fue un poco raro que haya que esperar a que alguien decida qué había pasado. Creo que se pierde un poco la esencia del fútbol".

Real Madrid clasificó a la final del Mundial de Clubes, donde el domingo enfrentará a Kashima Antlers, de Japón.