El jugador de Central Norte que pidió un día en la fábrica para poder enfrentar a River
El mediocampista debió pedir que lo reemplacen en el trabajo para poder jugar el partido de su vida contra el Millonario, el equipo del cual es hincha, por la Copa Argentina.
Flavio Guanca, de 31 años, recibió un llamado telefónico por parte del técnico de Central Norte, Ramón Apaza, que cambió completamente su vida. Y es que el entrenador lo llamó para que pueda estar presente en el partido ante nada más y nada menos que River, el club de sus amores, por la Copa Argentina.
"El Turco Apaza me conocía de hace mucho, me habló y me dijo que me quería por mis características de correr y meter. Cuando me preguntó si me interesaba porque él me necesitaba, obvio que le dije que sí. Fue todo muy imprevisto, nunca me imaginé jugar con River. Me sorprendí cuando me llamó", dijo.
Desde el entonces, el mediocampista comenzó a cuidar su físico y su alimentación, y hasta incluyo necesitó ayuda para coordinar los horarios con sus compañeros en la fábrica de artículos de limpieza, donde trabaja de operario los días de semana de 22 a 6, para poder entrenarse.
"Esta vez tuve que hablar con mis compañeros de laburo para poder viajar. Uno de ellos, hincha de Central Norte, va a trabajar a cuenta mía. Pero el lunes a la noche ya vuelvo. Después arreglaré esas horas con el supervisor, pero ellos siempre me apoyaron. Hace ocho años trabajo en la fábrica y en estos últimos días busqué no esforzarme tanto", explicó Flavio en declaraciones al diario La Nación.
“Es un sueño jugar contra un grande como River. Yo trabajo por la noche mientras Ponzio duerme en Estados Unidos, es muy loco. Pero bueno, dentro de la cancha somos 11 contra 11. Yo por eso le digo a mis compañeros de Central Norte que las pocas situaciones que tengamos, tenemos que aprovecharlas”, continuó.
El mediocampista no solo es fanático de River, sino que su ídolo es Leo Ponzio, jugador al que deberá enfrentar. "Siempre me enfoco en él y lo miro todos los partidos. Me motiva la edad que tiene y las ganas que le pone a la par del resto. Lo mismo que Mascherano, su garra y sus ganas me motivan. A mí me pasa eso: ese deseo de jugar, quizás sin saber tanto con la pelota, pero poder trabar, correr y meter", agregó.
Flavio señaló que su mayor motivación es la pasión que siente por el fútbol, esa que lo llevó a trabajar y entrenar sin parar para poder jugar. “La mayoría me pregunta cómo hago, y es que estoy acostumbrado a hacerlo. Pasa por el esfuerzo de cada uno y el enfoque que uno elige. Está en uno mismo, eso me motivó siempre. Esforzarme para que en algún momento pueda jugar un partido importante. Y mirá dónde estoy ahora, cuando menos lo pensé", concluyó.