Cada día que pasa se conocen más detalles del cabaret que se desató en el PSG entre sus figuras por los penales y los tiros libres.

Según un artículo publicado por el diario El País de Madrid, el jeque Nasser Al-Khelaifi dueño del club parisino envió a un emisario a dialogar con Edinson Cavani, para hacerle llegar una oferta de un millón de dólares a cambio de dejar a Neymar patear los penales.

La suma corresponde a una prima que consta en su contrato, si el uruguayo es máximo goleador de la Ligue 1, Al-Khelaifi ofrecía garantizarla.

Cavani, tercer capitán del equipo donde juega hace cuatro años, contestó que no rechazaría el dinero si el club quería pagarle más, pero que él no dejaría de patear los penales.

El ofrecimiento del presidente del PSG llega luego de que sus emisarios intentaran en vano convencer a Neymar de actuar de manera respetuosa y dejar el conflicto a un lado.
 

El fondo del problema


El artículo del diario español devela una interna en el plantel del PSG desde la llegada de Neymar, cuestión que considera como el verdadero motivo de los problemas que vio el mundo en las canchas. 

Los tironeos por una pelota como chiquilines es el reflejo de una interna en el plantel luego de la amenaza de UEFA de sancionar a PSG por no respetar el fair play financiero, provocó malas decisiones y revuelo en el club parisino.

"La hostilidad manifiesta de Cavani es solo la expresión de un sentir generalizado entre sus compañeros, especialmente entre los veteranos", afirma la nota de El País.

Luego de esa amenaza de UEFA, que advirtió al PSG en caso de que los gastos superasen en más de 30 millones de euros a sus ingresos (550 millones en 2016), el club puso en venta a muchos jugadores para no tener problemas.
 


Cavani, que para el jeque Al Khelaifi es intocable y no fue declarado transferible, se puso del lado de sus compañeros ofendidos.

La lista de los declarados transferibles incluyó a Di María, Pastore, Matuidi, Moura, Draxler, Ben Arfa, Aurier y Thiago Silva. Jugadores muy importantes del equipo en las últimas temporadas.

Blaise Matuidi, líder del grupo, se fue a la Juventus por 20 millones de euros, una baja suma. Todos se sintieron descartables para el club y Cavani fue uno de los que lideró los reclamos. Incluso Marquinhos y Moura, compañeros de Neymar en la selección de Brasil, tuvieron malas sensaciones luego de su llegada. Solo Dani Alves, su amigo, lo respaldó.

El sueldo de Neymar supera los 25 millones al año, el doble de lo que cobra Cavani, el segundo mejor pagado. "Silva y Motta le explicaron que ahí había grandes futbolistas expertos a los que no podía ignorar. Cavani le exigió respeto para los veteranos. Neymar los escuchó con aire distraído", se asegura en el artículo.

Emery supo que había que cambiar de estrategia y convenció a los dirigentes. Estos, devolvieron a muchos jugadores a la lista de intransferibles. Pero ya era tarde. Al-Khelaifi tomó decisiones que dejaron claros los roles en el plantel entre "prescindibles e intocables".

Marquinhos y Cavani, dos intocables, se mantuvieron del lado de sus compañeros afectados. Ahora se supo que el uruguayo rechazó el dinero que le ofrecieron para que Neymar patee los penales. 

No es cuestión de dinero, está claro.