Brasil y Rusia realizaron la ceremonia de transición
Antes de la final de la Copa del Mundo jugada este domingo, la presidenta brasileña Dilma Rousseff, su colega ruso Vladimir Putin y el mandamás de la FIFA Joseph Blatter dieron el ‘pase’ oficial de un Mundial a otro.
Rousseff junto al Presidente de la Federación de Rusia, Vladimir Putin, y el Presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, participaron en la celebración de la ceremonia de entrega de la Copa Mundial de la FIFA 2014/2018 antes de la gran final en el Maracaná de Río de Janeiro.
Luego del muy buen torneo que se vio en Brasil, los ojos y las expectativas ya están puestas en la próxima gran cita mundialista, que será en 2018. Será entonces la primera vez que se realizará en Rusia.
La ceremonia se llevó a cabo en el estadio de Maracaná, donde el Presidente Blatter entregó un certificado firmado que señalaba la entrega de Brasil a Rusia. Además, Dilma Rousseff y Putin recibieron balones oficiales firmados.
"La Copa Mundial de la FIFA en Brasil tenía un mensaje muy especial para el mundo: un mensaje de unidad y de conexión entre los pueblos, un mensaje de paz y de lucha contra la discriminación. Hemos disfrutado de un Mundial exitoso y dejaremos un legado en este país. Al mismo tiempo, la próxima nación anfitriona tiene una responsabilidad, y yo estoy convencido de que Rusia asumirá dicha responsabilidad y nos brindará un Mundial para el recuerdo en 2018", declaró el Presidente de la FIFA tras la ceremonia de entrega.
Dilma Rousseff, Presidenta de Brasil, añadió: "Brasil vuelve a sentirse muy orgulloso de haber organizado de nuevo la mayor celebración de fútbol del mundo. En los últimos 30 días, el mundo ha conectado con Brasil, ha celebrado goles con pasión en las 12 sedes y ha convertido este Mundial en el Mundial de los Mundiales. Estoy segura de que todos aquellos que han venido a Brasil, tanto turistas como delegaciones, se llevarán un gran recuerdo de nuestra hospitalidad y de nuestra alegría. También los brasileños se quedan con recuerdos inolvidables. Deseo al pueblo ruso un gran éxito en la organización de la Copa Mundial de la FIFA 2018".
En tanto, el presidente ruso cerró: "Quiero felicitar a la Presidenta Rousseff por la organización del Mundial. El fútbol ayuda a solucionar problemas sociales. Nuestra tarea consiste en crear las mejores condiciones posibles para los seleccionadores, los jugadores, los expertos y los aficionados. Quiero dar las gracias al Presidente Blatter y a sus colegas de la FIFA por el honor que nos han concedido. Haremos cuanto esté en nuestra mano para organizar un Mundial de altísimo nivel".
Rusia celebrará el próximo julio en San Petersburgo el primer acto importante de camino a la competición: el sorteo preliminar, en el que se definirá el proceso de clasificación que seguirán las asociaciones miembros de la FIFA.