Con mucha autoridad y justicia, Belgrano le ganó 2-1 a Quilmes como local y, de esta manera, los dirigidos por Ricardo Zielinski quedaron a dos unidades de los cuatro líderes que tiene el campeonato argentino de Primera División. La Cerveza, en tanto, no encuentra ni el rumbo ni la regularidad y se hunde en el fondo.

Si bien los visitantes llegaron a la igualdad transitoria sobre el final de la etapa inicial, los dirigidos por Julio César Falcioni jugaron a defenderse en la mayor parte del compromiso y se fue a su casa con una merecida derrota. El Pirata está de fiesta y se anima a soñar.