Funcionario de Avellaneda mató a su madre en un confuso episodio
El defensor adjunto del Pueblo de Avellaneda fue protagonista de un suceso trágico: terminó matando a su propia madre por manipular irresponsablemente un arma cargada y amartillada. Está detenido y acusado de homicidio.
Fanático de las armas -la policía halló en su domicilio varias de grueso calibre-, Rubén Alice, de 53 años, defensor adjunto del Pueblo del partido de Avellaneda, escuchó llegar a su familia y decidió correr la cortina de la ventana para ver el auto ingresar al garaje.
Pero cometió un grave error, más bien un acto irresponsable: corrió la cortina con el caño de una pistola Taurus calibre 9 milímetros. Y el arma estaba amartillada, por lo cual se disparó al manipularla de ese modo.
El saldo de lo que parecía en principio un nimio suceso, algo que no debía superar la cotidianeidad más prosaica, fue el fallecimiento de la madre de Alice, Celmira Setau, de 81 años, quien llegaba a la casa junto con la esposa del funcionario y al hijo de 14 años, y recibió el disparo en la cabeza, falleciendo en el momento.
El hecho que se conoció por estas horas, ocurrió alrededor de las 18.50 del sábado, en una vivienda ubicada en la calle de la localidad de Bernal, partido de Quilmes, donde vive Alice, actual defensor adjunto del Pueblo de Avellaneda, exconcejal del PRO y hermano de una concejal de Quilmes por el massismo.
El comisario mayor Fernando Grasso, titular de la Jefatura Departamental de Quilmes, dijo que el propio imputado fue quien les explicó lo ocurrido a los efectivos policiales de la Comisaría 2ª de Bernal que concurrieron tras el luctuoso hecho.
Tras escapársele el disparo, el oficial de policía precisó que "lamentablemente pega en la cara de la madre, debajo del ojo, cuando la mujer estaba en el asiento del acompañante del auto".
Los voceros de la investigación revelaron que, luego del incidente, el mismo Alice salió a la calle y llevó por sus propios medios a su madre herida al hospital de Wilde, pero Setau ya había fallecido antes de que pudieran atenderla.
Durante la noche del sábado, los agentes de la Policía Científica realizaron los peritajes de rigor en la casa del funcionario y se aguardaban los resultados de los análisis balísticos, entre otras medidas de prueba, para determinar si los hechos se dieron como contó el sospechoso, que quedó detenido por homicidio, o si surgen elementos que abonen nuevas hipótesis.