Resuelven el misterio de por qué las plantas tienen hojas de tamaños tan diversos
Las hojas del banano llegan a tener un tamaño un millón de veces más grande que la de algunos arbustos perennes. Si bien siempre se planteó que la clave, en el tamaño de las hojas, dependía de las condiciones del suelo, la luz y el agua hay otro factor que resulta fundamental.
¿Por qué las hojas de las plantas son tan diversas incluso en condiciones y ambientes similares? La naturaleza no suele ser caprichosa y la pregunta seguía rondando la mente de numerosos especialistas.
Una investigación publicada en la revista Science, que analizó el tamaño de las hojas de más de 7.600 especies vegetales de todo el planeta, llegó a la conclusión de que la posibilidad de heladas es clave.
Desde el siglo XIX se sabe que en los trópicos, por ejemplo, las hojas de las plantas son muy grandes por la disponibilidad de agua y el sobrecalentamiento mientras que en zonas más secas las hojas tienden a ser más pequeñas. “Este nuevo trabajo dice que el tamaño no solo depende de estas variables, sino también de las heladas”, confirma Rafael Villar Montero, del departamento de Botánica, Ecología y Fisiología Vegetal de la Universidad de Córdoba (UCO), España, en diálogo con EFE.
La anterior teoría del sobrecalentamiento y la disponibilidad de agua como limitantes del tamaño “no encaja del todo” si se tiene en cuenta que en los lugares más fríos del mundo las hojas están exentas de sobrecalentamiento y, sin embargo, suelen ser pequeñas.
Los investigadores aplicaron modelos matemáticos para predecir el tamaño de hoja máximo viable; y para los cálculos han tenido en cuenta la radiación solar y la pérdida de calor por transpiración, además del clima en cada zona.
Las plantas, como el cuerpo humano, pierden calor transpirando- es decir perdiendo agua- y los investigadores saben que una hoja que acumule temperaturas de más de 50 grados no es viable, por eso tiene que existir un equilibrio entre sobrecalentamiento y transpiración (las hojas más pequeñas tienen menos probabilidades de sobrecalentarse).
En definitiva, “lo que hemos hecho es calcular el riesgo de sobrecalentamiento o de helada y hemos visto si el tamaño de las hojas está más limitado por una u otra variable”, planteó Villa Montero.
(EFE)