A partir del 14 de febrero, y durante tres semanas, 80 mujeres científicas se reunirán en la Antártida para trabajar codo a codo en la problemática del cambio climático. 

Este proyecto, que nació en Australia y que celebra ahora su segunda edición, se llama Homeward Bound y busca el  empoderamiento para mujeres de todo el mundo del ámbito científico y tecnológico. 

La iniciativa se enmarca en un proyecto más amplio a diez años con el objetivo de que, al final del mismo, se cree una red mundial de mil mujeres líderes contra el cambio climático.

En este nuevo viaje, hay científicas de diversos países- en esta edición no hay especialistas argentinas- que van a trabajar en cinco estaciones de China, Rusia, Reino Unido, Estados Unidos y Argentina, en la Antártida. 
 

Este proyecto tiene “una gran carga simbólica”, tanto en la parte de género como en la lucha contra el cambio climático, además de incentivar a las mujeres a estudiar carreras científicas.