Junto a empresas asociadas, la compañía Boeing logró desarrollar la microrretícula metálica, una estructura polimérica 3D de células abiertas, construida de pequeños tubos metálicos huecos.

Según sus creadores, podrá utilizarse para construir nuevos componentes estructurales para la industria aeroespacial, ya que permite que las aeronaves sean mucho más livianas y, por tanto, brindar una mejor eficiencia en el uso del combustible.

"Se trata de una estructura de polímero 3D abierta a nivel celular, que se puede comparar a la estructura ósea", comentó la investigadora Sophia Yang, de HRL Laboratories.