El agujero negro, que fue fotografiado, se encuentra a 500 trillones de km de nuestro planeta. El pozo gravitacional tiene un diámetro de 40.000 millones de km, tres millones de veces más que el diámetro de la Tierra, y fue descrito por los científicos como "un monstruo".

Este hito en la historia de la astrofísica se consiguió gracias a un proyecto internacional que combinó el poder de ocho radiotelescopios alrededor del mundo. El nombre de la iniciativa es Telescopio del Horizonte de Sucesos, Event Horizon Telescope o EHT por sus siglas en inglés, una colaboración en la que participan cerca de 200 científicos.

Este hito pone a prueba uno de los pilares de la física moderna: la teoría de la relatividad general de Albert Einstein, presentada en 1915. Fue presentado en varias conferencias de prensa tienen lugar simultáneamente en Washington (EE.UU.), Bruselas (Bélgica), Lyngby (Dinamarca), Santiago de Chile, Shanghái (China), Taipéi (Taiwán, China) y Tokio (Japón) para divulgar un "resultado de impacto".

Hasta el momento nunca se ha visto una imagen real de un agujero negro, que supone deformaciones extremas en el espacio-tiempo tan fuertes que su gravedad masiva ni siquiera permite que la luz se escape una vez que se acerca lo suficiente.

Los agujeros negros son literalmente invisibles y absorben toda la radiación electromagnética, por lo que ninguno de los telescopios de los que dispone la humanidad (ya sean de radio, de rayos X, óptico o gamma) pueden detectarlos. Pero teóricamente es posible ver su horizonte de eventos, el punto más allá del cual ni la luz puede escapar debido a la intensa gravedad del agujero negro. 

Para obtener la imagen, se conectaron las señales de ocho radiotelescopios de todo el planeta, formando de esta manera un gran telescopio del tamaño de la Tierra.

Esta es la fotografía