¿Los imanes de la heladera consumen energía? Cuál es la teoría que circula en redes y qué dicen los expertos
Circuló un mito en internet que sugiere que el aparato podría incrementar el consumo eléctrico.
En las heladeras, es común tener imanes pegados: desde teléfonos útiles hasta recuerdos de viajes o fotos, suelen estar presentes. Una de sus curiosidades es que podrían llegar a consumir más electricidad.
La inquietud sobre si los imanes en la puerta de la heladera podrían incrementar el consumo eléctrico ha llevado a varias marcas y expertos a aclarar esta cuestión.
Qué dicen los expertos sobre el consumo de energía de los imanes de la heladera
Según una compañía alemana, el uso de algunos imanes en la puerta del refrigerador no representa un problema significativo para el consumo eléctrico. Aunque un exceso de imanes podría reducir la vida útil de las bisagras por el peso, no afecta el funcionamiento eléctrico del aparato.
De manera similar, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) señala que, aunque las corrientes eléctricas y los campos magnéticos interactúan, el pequeño campo generado por los imanes es insignificante y no influye en el consumo energético del refrigerador.
Además, una empresa surcoreana ha respaldado esta información, indicando que los imanes en el exterior de la heladera no afectan ni el consumo de electricidad ni la capacidad de refrigeración interna del aparato.
Cuáles son los consejos para que la heladera consuma menos energía
Según Xataka, aunque los imanes no influyen en el consumo de electricidad del refrigerador, hay otras prácticas que pueden ayudarte a reducir el gasto energético:
- Evita dejar la puerta abierta durante mucho tiempo, ya que esto hace que el refrigerador tenga que trabajar más para mantener la temperatura interna.
- No ajustes la temperatura a niveles muy bajos innecesariamente.
- Mantén el orden dentro del refrigerador, colocando los alimentos en sus compartimientos correspondientes.
- Revisa periódicamente los sellos de las puertas para asegurarte de que estén en buen estado.
- Coloca los alimentos en el refrigerador solo cuando estén a temperatura ambiente, ya que colocar comida caliente aumenta el consumo de energía.
- Descongela regularmente el refrigerador, ya que la acumulación de hielo puede dificultar la transferencia de frío.