Aquellas personas que tenga más de una mascota en casa, sabrán que no es fácil contentarlos al mismo tiempo, sobre todo cuando el tamaño supera cualquier media.

Estos gran daneses comparten el amor de su dueño, pero el hombre sólo puede atender a uno: mientras el que tiene que esperar muestra su malestar, el otro también se tira al piso para que las caricias también alcancen a su hermano.