Las cabras que se cansaron del circo
¿Quién dijo que los animales no se divierten? Las curiosas cabras encontraron una chapa curva que les sirvió para balancearse y jugar un rato.
Los dueños del campo las habían comprado en un remate de animales de circo, pero jamás se imaginaron las habilidades que tenían.
Un día, mientras erigían un silo para guardar cereal, los animales encontraron la chapa curva y comenzó la diversión.