¿Es este el bebé más enojado del mundo?
Su cara lo dice todo. A pesar de que su madre intente cambiar su rostro facial a la fuerza, el pequeño no puede escapar de su incontrolable ira y el enojo que lo invade.
Un pequeño de mal carácter no puede evitar su cara de enojo y se muestra inquebrantable ante el intento de sus padres por querer sacarle una sonrisa. Quizás no lo dejaron dormir su tan preciada siesta.