Dicen que no hay mejor publicidad que la que hacen tus clientes. La frase también puede valer al revés, en especial desde que las redes sociales permiten compartir todas las experiencias. 

Es por ello que Charlene Quirk se hizo famosas por esas horas al difundir lo que le pasó tras pedir una pizza. La joven, que pide al mismo local desde que tiene catorce años, llamó para advertir que había recibido un preservativo dentro de una de las bolsas térmicas que ayudan a mantener la temperatura del pedido. En Canadá son muy comunes este tipo de bolsas por el extremo frío. 

Pero la indignación se doblegó con la respuesta del gerente del local. "Me prohibió volver a ordenar de su restaurante. Me dijo que me jodiera, y que me lo quedara y lo utilizara", contó la chica en su cuenta de Facebook.

El posteo se compartió miles de veces y dio vuelta el mundo. Seguramente el gerente la va a pensar dos veces la próxima vez. 

Se quejó porque encontró un preservativo en la pizza y esto fue lo que le contestaron