Desde el 1 de enero, los supermercados porteños dejarán de entregar bolsas plásticas a sus clientes. En realidad, no las venían regalando, sino vendiendo. Pero de todas maneras, dejarán de existir.

A través de la resolución 341/16 publicada en el Boletín Oficial en el mes de septiembre, la iniciativa tiene como objetivo minimizar las consecuencias que generan las bolsas de polietileno en la naturaleza. Pero los supermercadistas y clientes tienen otro punto de vista.

Por ejemplo, el director de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), Juan Vasco Martínez, expresó: "La bolsa es un servicio indispensable, y con esta medida se perjudica sobre todo a la gran cantidad de población flotante que llega todos los días a la ciudad, que pasa entre ocho y diez horas de su jornada y hace sus compras diarias en los comercios porteños".

Además, comentó que "desde la entrada en vigor del cobro de las bolsas plásticas se logró reducir la entrega en un 70%". Pero más allá de eso lanzó un dato más interesante aún.

"No tienen en cuenta que el 75% de las bolsas plásticas verdes y negras que hoy se dan en los comercios se reutilizan, ya sea para tirar los residuos hogareños o para otro uso doméstico", expresó.

En general la población suele reutilizar las bolsas plásticas para difentes usos, el más común, para residuos. Ahora, habrá que hacerse de sus propias bolsas para sobrevivir.

Algunos súper consultados por La Nación como Carrefour, comentaron que ya empezaron a informar por medio de afiches y audios. Además, pondrán a disposición más variedades de tamaño y precios con "opciones que van desde los $5 hasta los $25".

En Walmart, en cambio, están analizando poner a la venta unas bolsas de tamaño reducido a $2,50 con el fin de "ayudar al cliente con la transición". 

De todas maneras significará un presupuesto más para el porteño, que ya viene pagando los platos rotos de las malas políticas desde hace años. Los clientes consultados, no se mostraron muy conformes con la medida.