La mujer le pedía un vaso de agua para tomar una pastilla y terminaba dopando a sus víctimas para robarle.

Aurora, de 79 años, cayó presa tras una investigación donde se le imputó un extenso historial criminal. Aunque por su edad siempre queda en libertad. 

La denuncia se originó por una jubilada que la apuntó por haberle pedido un vaso de agua para tomar una pastilla, y al tomar ella también el agua, se desmayó. Cuando se despertó se dio cuenta que le había robado. 

La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°57, a cargo del juez Anselmo Castelli, se hizo con varios videos de la mujer donde utiliza el mismo modus operandi en diferentes locales de la zona de Liniers y Mataderos.

La delincuente es abuela de dos nietos, es beneficiaria de una jubilación y una pensión, y su único ingreso registrado fue durante su tiempo en prisión, donde trabajó en un penal federal.

Los hechos delictivos que se le imputan datan desde el año 2000 y ha sido condenado en diferentes oportunidades, aunque por su aceleración siempre termina recibiendo la libertad.