La Real Academia Española modificó la expresión "sexo débil" para identificar a mujeres
Hasta hoy cuando alguien buscaba en el diccionario de la Real Academia Española (RAE) podía leer que “sexo débil” era “conjunto de las mujeres” y el “sexo fuerte” correspondía al “conjunto de los hombres”. Sin embargo, esto cambio para siempre.
El lenguaje y sus formas son afortunadamente algo que excede a los estanco de muchos usos y costumbres. Cada Navidad, la Real Academia Española (RAE) realiza una revisión del registro de vocablos y agrega nuevos.
Este miércoles, 20 de diciembre, la RAE presentó más de 3.000 enmiendas y adiciones a su edición digital en la que se destaca dejar de llamar y/ o considerar como "sexo débil" al conjunto de mujeres.
La campaña para alterar esa expresión machista y despectiva fue iniciada en marzo de este año por la ciudadana española Sara Flores Romero en la plataforma Change.org y que también tuvo su repercusión en las redes sociales con el hashtag #Yonosoyelsexodébil.
Entre las palabras que todavía quedaron a la espera de aprobación figura "heteropatriarcado" utilizado habitualmente en textos, manifiestos y redes sociales para expresar una normatividad que atenta contra la igualdad en lo diverso, el feminismo y otras expresiones.
Desde la institución señalaron que van a esperar a evaluar usos y constumbres ya que "...aplicar la corrección política llevaría a destruir el diccionario", aseguró Darío Villanueva, director de la RAE.
Asimismo, la academia dio la bienvenida a sus novedades: términos como "posverdad", "buenismo" "chusmear" y "postureo", además de extranjerismos como "fair play", "halal" o "hummus"; aunque demostró su preocupación por cierta "invasión del inglés en nuestra forma de expresarnos".
Del inglés se adopta "fair play" (juego limpio), "cracker" (los que vulneran sistemas de seguridad informáticos) o "container" (en las acepciones de contenedor y de barco destinado al transporte de mercancías en contenedores).
Entre las curiosidades figuran dos términos de etimología griega, la "aporofobia", o miedo al pobre, y la "amusia", definida como la "incapacidad de reconocer o reproducir tonos o ritmos musicales".
Según la RAE, el diccionario digital recibió en 2016 más de 600 millones de consultas. A final de este año "esperamos superar ampliamente esta cifra acercándonos, incluso, a los mil millones", celebró Villanueva.