El hecho ocurrió en el laberíntico barrio de  Chandu Nagar, en el noreste de Delhi, cuando la noche del 31 de Octubre un padre de seis hijos decidió invitar a su inquilino a cenar con su familia.  Una vez que terminó la cena, invitó a su familia a descansar para quedarse a solas con el inquilino.

Según el relato de la policía, el padre (cuya identidad no fue revelada)  amarró y amordazó al inquilino, calentó una espátula de acero en la estufa y le quemó los genitales al violador de su hija hasta que finalmente murió.

La niña de 12 años contó como estaba sola en su casa, unas semanas antes del asesinato cometido por su padre, cuando  el inquilino la obligó a entrar a su casa, ató sus manos y la violó. Luego la amenazó con matar a su padre si le contaba a alguien lo ocurrido.

La joven quedó embarazada en la violación. "Primero mi padre se molestó mucho conmigo. Le confesé que había sido el inquilino y él respondió que le enseñaría una lección", dijo la chica según detalló la BBC.

"No tenía ni la menor idea. No sabía que mi hija había sido violada y que ahora estaba embarazada", sollozó la madre que ahora ve como su familia quedó destruida. El padre de familia era conocido por su carácter apacible y solía vender hamburguesas en la calle.

El inquilino de 45 años  había estado viviendo en una de las habitaciones de la casa durante los últimos cinco años. Pagaba unos U$S 8 de renta mensual que colaboraban con la economía familiar.

"Somos de aldeas vecinas del estado central de Madhya Padresh. Lo conocemos desde hace tiempo y lo tratábamos como un miembro más de nuestra familia", aseguró el abuelo de la chica.

El padre de la joven violada se entregó a la policía. "Lucía muy nervioso. Dijo que había cometido un error, que había matado a alguien", relató el subinspector Arun Kumar.

Las violaciones son un foco de tensión en India desde diciembre de 2012, cuando una estudiante de 23 años murió en un autobús de Delhi tras ser violada por una pandilla.

El padre de la joven podría ser penado con la muerte aunque muchos de sus vecinos se mostraron a favor de él y de la "justicia por mano propia" en estos casos.