El calvario de vivir al lado de un hombre acosador y violento
Romina Scalora está sufriendo hace tres años el hostigamiento de un vecino, Hernani Rebuffo. Gritos, golpes a la puerta de su casa a altas horas de la noche, empujones por la escalera y seguimiento por las calles, son solo una parte de lo que sufre ella junto a su madre.
El agresor es Hernani Rebuffo, nieto del artista Víctor Rebuffo, y se hizo conocido por denunciar que le robaron obras de arte de su abuelo. Por esta cuestión apareció muchas veces en televisión. En dichas denuncias, dice que una empleada doméstica y ahora, sus vecinas, formaron parte de un equipo delictivo para robarle a él. No conforme con esto, las acusa de narcos.
"Chorras, hijas de puta, las voy a matar, me las voy a coger", es una de las tantas frases que grita Rebuffo contra Romina Scalora y su mamá. Hace 30 años que viven en el mismo lugar, en un edificio de no más cuatro departamentos, donde viven este calvario.
"A mi me empujó por las escaleras, a mi mamá la persiguió por la calle", relata Romina, que se cansó de denunciarlo por vía judicial: "tengo una carpeta llenas de denuncias en todos los ámbitos judiciales en que me presenté. Lo mantuve siempre en la intimidad, pero evidentemente deberé acudir a publicarlo para que tenga algún tipo de respuesta", dice en Twitter, donde decidió contar el miedo que está viviendo ella y su mamá.
Rebuffo, además, tiene denucias por acoso en varias escuelas donde trabajó, incluso hay vídeos en Youtube donde da muestra de su hostigamiento a las personas que se vinculan con él.
Pero esta vez, Rebuffo armó una página en Facebook donde pone información personal de Romina y de su mamá.
"Es un vecino mio. Si lo googleas, aparece un canal de YouToube donde él decía que lo querían matar. Hasta el domingo no me había incluído en las denuncias en las redes, pero mi denuncia la archivaron porque mis audios que presenté no se escuchaban bien (los gritos y amenazas) cuando se enteró, se volvió loco y comenzó a violentarse contra mí. Me acusa de formar parte de una banda narco y de sicarios", cuenta Romina por audio sobre lo que está viviendo.
"No hay causa de esto. Cuando llegó al edificio le dijimos si quería juntarse con nosotras, él no vino. Le volvimos a tocar el timbre, si se quería a juntar y ahí comenzó a reaccionar mal, ahí comenzaron los hostigamientos. Se encerraba en su casa y gritaba 'hijas de puta, viejas chorras'. Una vez estuvo un mes pateando la puerta de mi departamento cada diez minutos durante toda la noche, ese mes no dormí, tuve problemas en mi trabajo", dice.
Las miles de denuncias que tiene realizadas Romina son en el CGP de San Juan y Sarandí en las oficinas de violencia de género pero que las respuestas de ahí es que no se las podían tomar "porque no somos familiares, no hay ningún vínculo más que el de ser vecinos". También hay una denuncia penal en la Fiscalía Nº27" y denuncias en la comisaría, tengo 20 mil, porque cada vez que le agarra un brote, llamo a la Policía y radico en el momento la denuncia".
Docentes, padres de alumnos y personal del Colegio Huergo, sufrieron los hostigamientos de parte de esta misma persona que fue profesor. Luego de varias denuncias, se lo sumarió y fue separado del cargo.
Romina ya no sabe más que hacer para poder vivir en paz en su casa donde vive hace más de 30 años junto a su madre, Silvia. Y sobre todo, evitar consecuencias peores de las que ya está viviendo.