Con el ‘physique du rol’ propio de cualquier serie de narcos o documental de las maras, este detenido en una unidad bonaerense abogó por el uso de los teléfonos celulares en las cárceles.

Desde que Patricia Bullrich decidió requisar los pabellones para privarlos de ese beneficio, este pasó a ser un tema central para los detenidos.

Pero los ‘call center’ del delito que se crean dentro de las unidades penitenciarias juegan en contra de este pedido, ya que desde allí no solo se maneja la delincuencia en las calles sino que también se hace ‘phishing’ y secuestros virtuales.