El pasado 27 de enero en el capitulo “Good Luck Charlie” una niña llega a jugar a la casa de Charlie, la protagonista, acompañada de dos mujeres a las que presenta como sus mamás, situación que es tomada por todos los personajes como algo absolutamente normal.

Esta incursión de una pareja homosexual a un show infantil llegó seis meses después de que la cadena anunciara su plan para presentar a sus primeros personajes gay.

Al respecto indicaron: "Para crear esta historia la cadena contó con la ayuda de expertos en desarrollo infantil. Como toda la programación Disney, pretende ser relevante para los niños y sus familias y reflejar adecuadamente y de forma no exclusiva la diversidad social".

A pesar de este avance, las críticas no tardaron en llegar. Un sector conservador, la mal llamada asociación defensora de la familia "One Million Moms" acusó a Disney Channel de "corromper" los shows infantiles con contenido LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales) y tacharon la relación de las mamás de Taylor como “anormal” y “no adecuada para sus hijos”.