Para los fundamentalistas, este invento no hace más que otorgarle valor comercial a la planta, esencialmente para su uso recreativo pero lejos de contemplar las bondades del cultivo de cannabis tradicional, ese que requiere que las personas se involucren en el desarrollo de las flores e incorporen valores como la paciencia, la constancia, la perseverancia o incluso la calma con la que el cultivo ayuda a superar tantísimas enfermedades graves. 

En cambio, si sos de los que prefieren estar todo el día 're loco' y las cuestiones de jardinería y botánica te parecen un embole, lo juzgarás como el invento del siglo. Mientras en nuestro país todavía se sufre la persecución policial de los cultivadores, la inminente comercialización de este producto es una muestra más de que el autocultivo es la llave para que el carácter medicinal de la planta sea una solución a la calidad de vida de muchísimas personas, y una posible salida a la inútil persecución del narcotráfico.

Uri Zeevi, es CEO y co-fundador del proyecto Seedo, respondió algunas preguntas al sitio Rewisor: "Seedo se fundó en 2014, pero el ingeniero agrónomo y el CTO (Chief Technology Officer o Director de Tecnología) trabajaron juntos durante más de 8 años, a principios de Siglo, para una compañía que desarrollaba contenedores comerciales de cultivo hidropónico automático para lechugas. En 2014, el CTO, Mr. Michael Maman, decidió 'pivotar' la tecnología hacia una máquina de cultivo casero en lugar de comercial", aseguró.

"Ya tenemos prototipos operativos que cultivan con éxito. De hecho, éste es el de cuarta generación. Estamos a punto de empezar la producción masiva", le contó a la publicación web sobre la máquina que utiliza el sistema de cultivo de hidroponia, es decir, en el agua. 

Sobre el tiempo que tarda la semilla, el crecimiento, el secado y todas las etapas del cultivo hasta obtener las flores, Zeevi expuso resultados en tiempo y calidad: "El tiempo y la cantidad dependen del tipo de semilla. Por lo general suele tardar alrededor de 3 meses en crecer y entre 5 y 8 días en secar, así que diría que unos 100 días de la semilla al cogollo. En cuanto a la cantidad, de nuevo, cada tipo es distinto, pero según nuestra propia experiencia de cultivo, lo mínimo que hemos obtenido han sido 2 onzas (algo más de 56 gramos y medio) y lo máximo fueron 7 onzas (casi 200 gramos) PERO… lo que deberías hacer es preguntarnos por la calidad, ésa es la cuestión principal, ya que Seedo conserva la planta en condiciones de laboratorio, desde asegurarse de que crezca con la temperatura exacta durante todas las etapas del crecimiento hasta el tiempo perfecto de fertilización, y soltando CO2 durante la fotosíntesis, dando como resultado una calidad de cultivo que es más que alucinante".