El cruce del tuitero oficialista conocido como La Pistarini con el cantante Dillom en un avión no sólo lo hizo tristemente célebre sino que terminó de ponerle una lápida ya que se ve bien difícil que el muchacho se recupere de esto.

Según Duggan el muchacho no es uno más sino que es uno de los primeros trolls pagos del Gobierno y socio del inefable Gordo Dan por lo que la bala debe haber entrado y fuerte.

Pero lo que destacó Carla fue que la resistencia ante la violencia ejercida desde el poder vino, al menos por el momento, desde el lado del arte y no sólo destacó a Dillom sino también a Lali.