La escena fue captada por las cámaras de seguridad que registraron toda la secuencia, desde que comenzó como una simple discusión, hasta la llegada de la policía para dispersar a ambos bandos.

La llegada de las fuerzas del orden fue providencial porque uno de los dos hinchas de Nueva Chicago estaba muy lastimado -recibió posteriormente cinco puntos de sutura en el cuero cabelludo- y todo podría haber terminado peor.

La agresión de los metaleros parece injustificada si uno se atiene a las imágenes, aunque no se sabe si los cruces no vienen de antes.