Se trata del reclinador "Nap Nanny", que los expertos ya venían recomendando a los padres que deje de utilizarse de inmediato.

La sexta menor que falleció, vivía junto a sus padres en Nueva Jersey, y fue encontrada pegada a un lado de uno de estos objetos según reveló la Comisión de Seguridad de Productos de Consumo.

El director de Comunicaciones de la CPSC, Scott Wolfson, indicó que "tienen que dejar de usarlo porque es peligroso", afirmó y  agregó: "Ya hubo seis muertos, y no queremos que otro niño muera innecesariamente".

Además, Wolfson señaló que vender el Nap Nanny en los Estados Unidos es un acto ilegal.

Amazon.com, Buy Buy Baby, Diapers.com y Toys R Us/Babies R Us, decidieron sacarlo de la venta por solicitud de la CPSC. Según indicaron, el fabricante no puede o no está dispuesto a participar en el retiro.

La CPSC advierte a los padres y cuidadores que estos reclinadores para bebés tienen defectos de diseño, y también tienen defectos en las advertencias e instrucciones que acompañan al producto. Todo ello representa un riesgo sustancial de lesión o muerte.

En el momento del retiro del 2010, la CPSC tenía bajo su conocimiento el caso de una muerte que había ocurrido en el reclinador Nap Nanny y 22 informes de recién nacidos que quedaron colgando o cayeron por encima del costado del Nap Nanny, aun cuando la mayoría de los niños tenían colocado el arnés. Incluso cuando esta silla estaba era utilizada dentro de una cuna, en ocasiones el bebé quedaba atrapado y colgando entre el arnés y alguna de las paredes de la cuna, lo que le provoca graves lesiones.

Cerca de 165.000 asientos reclinables Nap Nanny y Nap Nanny Chill fueron vendidos entre 2009 y 2012. Aunque ya no se ofrecen más en las tiendas -fueron retirados del mercado el año pasado-, durante meses la compañía que los confeccionó se negó a tirarlos u ofrecer reembolsos. Esto en lugar de insistir en la seguridad del producto cuando se utiliza en forma correcta.

En un comunicado, un funcionario de la compañía, ahora fuera del negocio por dos años, le dijo al canal ABC News que tenía el corazón destrozado por las familias que perdieron un hijo. Pero al mismo tiempo señaló que el "Nap Nanny" nunca fue diseñado para ser utilizado en una cuna.

Brian Thiel, padre de una beba de cuatro meses fallecida como consecuencia de la utilización del Nap Nanny, recordó que "hubo una muerte casi un año antes de que falleciera mi hija. Si hubiéramos sabido, nunca hubiéramos comprado este producto".