La conectividad es mucha. La comunicación fluye como por un caño pero eso trae sus problemas. Todo adicción tiene sus consecuencias y son las redes sociales una nueva plataforma a estudiar por sociólogos, psicólogos y ahora médicos. En Inglaterra, una enfermera de 34 años y 27 semanas de embarazo, es la primera persona diagnosticada por "WhatsAppitis", padecimiento provocado por usar WhatsApp en exceso.

Dicha mujer pasó más de seis horas respondiendo mensajes y “chateando” a través de WhatsApp. En ese tiempo, realizó movimientos continuos con ambos pulgares para enviar mensajes y se dirigió al hospital con dolor en la muñeca. El diagnóstico fue tendinitis en los pulgares.

La revista británica, The Lancet, lo llamó "WhatsAppitis" y, aunque suene algo forzado, es acertado. Se le recomendó un tratamiento a base de antiinflamatorios y abstinencia total del celular, pero la paciente no hizo caso y volvió a sufrir complicaciones por el mismo motivo una semana más tarde.

Especialistas advierten que, este tipo de enfermedades podrían ser padecimientos emergentes y que los médicos deben ser conscientes de estos nuevos transtornos que genera la tecnología emergente.