En una entrevista con Página 12, Pablo Argibay Molina, un reconocido abogado penalista que actualmente tiene entre sus clientes a Hernán Arbizu, ex ejecutivo "arrepentido" del JP Morgan, por cuyas declaraciones están siendo investigados directivos del Grupo Clarín, dio detalles relevantes para la causa de Papel Prensa  y pidió que la Justicia lo convoque como testigo.

Como primera medida dijo que "Lidia Papaleo (viuda del banquero David Graiver y heredera de sus bienes) dice la verdad" en relación a la compra de Papel Prensa por parte del Grupo Clarín en durante la última dictadura civico-militar. También sostuvo que "Miguel Tobías Padilla (subsecretario de José Alfredo Martínez de Hoz) manejaba la información de todo lo que iba ocurriendo en la parte económica que bajaba de las Juntas. Y fue el que manejó los tiempos del negocio”.

Tras mencionar cómo llegó a vincularse con el tema de Papel Prensa, Argibay Molina recordó que "en marzo de 1972 Héctor Magnetto entró a Clarín”. Al señalar a  Tobías Padilla dijo que "él estaba en el estudio Sáenz Valiente Padilla. Tuvimos algunos trabajos más con él, hizo una consulta en un momento dado, una charla informal, porque tenía problemas con los gremios y con la Confederación Económica".

En ese sentido, dijo que "en el ’76 Miguel Tobías Padilla aparece como subsecretario de Martínez de Hoz. Un tipo inteligentísimo. Yo me pregunto por qué no figura Padilla en el libro (de José Ignacio López sobre Clarín). Y es porque es el que lo vincula con Papel Prensa". "Primero explico por qué estoy yo metido en esto. Porque (el ex secretario de Derechos Humanos Eduardo Luis) Duhalde dice que yo declaré en Papel Prensa, pero yo nunca declaré. Mi estudio había intervenido en dos temas vinculados con Papel Prensa. Uno era el de Julio Broner, el presidente de la Confederación General Económica, y otro era el de Manuel Madanes, de Aluar. A la mujer de Madanes, Matilde Matraj de Madanes, se la llevan presa", señaló.

Al respecto, añadió que "nosotros la canjeamos. Bueno, el grupo empresario, yo era un pibe, pero habíamos hecho el hábeas corpus que dio negativo". Indicó que "como Aluar era un tema de Fuerza Aérea, se hizo una presión y se hizo el canje que se iba a materializar con el retorno de Manuel Madanes al país y la soltura de ella. La sacamos y nunca nadie habló de esto hasta que (el jefe de la policía Bonaerense Ramón) Camps saca su libro y aparece Matilde Matraj de Madanes. También vinculado con esto está el tema de Broner. Yo lo seguí en Conarepa (Comisión Nacional de Responsabilidad Patrimonial, creada por la dictadura para “investigar” y apropiarse de bienes de empresarios)".

"El tema es que el canje y las actuaciones anteriores me dejaron ver que el lío entre las Fuerzas Armadas era terrible, era un factor determinante. Entonces, ¿por qué firma Lidia Papaleo el 2 de noviembre? ¿Por qué en esa fecha (Magnetto) le dice ‘si no me firmas te van a matar a vos y a tus hijos’? Porque tenían la información de que iba a pasar eso. De que en la pelea se los iban a chupar a todos los duros", afirmó.

Remarcó que "él tenía la información por Miguel Tobías Padilla. Se apuró a manotearlo porque si esto entraba en manos de la Junta se lo comía (Emilio) Massera, que es el que mata a Manuel Tobías Padilla en abril de 1978. Se apuran porque querían evitar que vengan los duros, que eran Ramón Camps, (Guillermo) Suárez Mason y los que estaban con la Marina".

"La clave es Miguel Tobías Padilla, que era el tipo que manejaba la información de Martínez de Hoz y todo lo que iba ocurriendo en la parte económica que bajaba de las Juntas. Era el abogado personal de Magnetto". "Fue el que manejó los tiempos del negocio. ¿Por qué ese día tenían que firmar sí o sí o los iban a matar? Eran ciertas esas cosas. Por eso ella no miente, Lidia Papaleo está diciendo la verdad. Es la situación de coacción que sufrió", finalizó.