Nicole Castillo, es militante bisexual y presidenta del Centro de Estudiantes de Psicología de la UBA, y espera con mucha expectativa la moviilzación de hoy: "La marcha del orgullo siempre es una fiesta de brillos, libertad y música, un oasis en medio de un difícil contexto". La referenta de Mala Junta agregó: “El crecimiento del neoliberalismo que atraviesa nuestro continente trae de la mano una avanzada conservadora y represiva que impacta directamente sobre nuestros cuerpos disidentes. Estamos viviendo un crecimiento de la persecución a las personas LGBTIQ en toda la región.”

En este sentido, Nicole también opinó: “Por eso es más importante que nunca la unidad del movimiento LGBTIQ. Para imaginarnos otro futuro posible, porque sabemos que en unidad podemos transformar la desesperanza en alegría. El orgullo es nuestra principal herramienta para construir reclamos y conquistar derechos. Al miedo y la violencia le oponemos más orgullo y unidad.”

De la Marcha también participaron los más de 2.000 participantes del Encuentro Latinoamericano de Varones Antipatriarcales, que este fin de semana se está desarrollando en la Ciudad de Buenos Aires. Con más de 30 talleres, el objetivo del Encuentro es poner sobre la mesa la necesaria construcción de nuevas masculinidades que dejen de lado sus privilegios para construir una sociedad más igualitaria. Juan Pablo Cuciniello, autodefinido como puto y coorganizador del evento declaró: “La doble traición al patriarcado de ser hombre feminista y puto nos empuja a las disidencias a luchar con más fuerza contra este sistema opresor, en un contexto muy preocupante para muchos de nosotres. Los varones tenemos que cuestionar nuestros privilegios como hombres, ayudar a desarmar la cultura de la violación y romper con la complicidad machista”.