El titular de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, está desesperado por encontrar aliados políticos. Es que el fracaso electoral del 2013, sumado a la reunión fallida en Mar del Plata, tiene al camionero como bola sin manija, y cada vez más tendiente a disparar a la derecha.

Moyano que ya había extendido sus brazos para hacer una alianza electoral con el empresario y neoliberal Francisco De Narváez, ahora volvió a juntarse con Mauricio Macri y los acompañó Patricia Bullrich.

En tanto, la declaración más saliente de Moyano de este martes, fue que reclamó que la Presidenta debería haber ido a la reunión en Davos y no a la de la CELAC en CUba.

El dirigente sindical, que supo ser kirchnerista hasta que su ambición de poder lo llevó a distanciarse del proyecto, ahora reclama que el gobierno se junte con grandes empresarios en lugar de priorizar acuerdos con los países de América Latina.

Por su parte, Mauricio Macri, dijo tras la reunión con Moyano y Luis Barrionuevo que lo que buscan es "acordar políticas a largo plazo". Moyano manifestó estar "reconfortado" con el encuentro con el líder del PRO.

Como si todo este marco fuera poco, la exministra de Trabajo de De la Rúa, Patricia Bullrich, también participó del encuentro en lo que fue algo sorpresivo, tras haber protagonizado recordadas peleas con la actual diputada.

Parece que Bullrich y Moyano decidieron priorizar las necesidades actuales y olvidar las irreconciliables diferencias.

"Me peleé mucho con Patricia y aprendí que en el enfrentamiento perdemos todo", manifestó Moyano durante la reunion de este martes.