El asado que ofreció el martes Javier Milei en la Quinta de Olivos para celebrar junto a los 87 diputados que votaron a favor del veto presidencial a la nueva movilidad que mejoraba las jubilaciones, sigue dando qué hablar

Lilia Lemoine, única invitada que llegó caminando y no en la combi que había dispuesto el Gobierno desde el Congreso, protagonizó un nuevo escándalo. 

Tal contaron en el programa de Jorge Rial en C5N. Contaron en Argenzuela que, por la desconfianza que reina en el Gobierno, y por miedo a que se filtre información, todos los presentes "tuvieron que dejar todo en una bolsa ziploc, incluido los teléfonos celulares".

Lemoine "fue apropósito caminando para hablar con la prensa", aseguró Rial; al tiempo que explicó que, tal cual el pedido, “todos dejan sus celulares y se dedican al bandejeo”. 

Y contó que a Lilia la sentaron en la otra punta de Milei, al igual que a María Celeste Ponce: “Lilia intentó acercarse a Milei y la cortaron como una papa. Cuando termina la cena, ella hace un desplante fuerte y trata de echarle la culpa a los custodios sobre la situación”.